El alcornocal ocupa en el mundo algo mas de dos millones y medio de ha., situadas principalmente en el ámbito occidental del Mar Mediterráneo, en zonas litorales, de influencia marina y oceánicas. 

Por superficie, el primer lugar lo ocupa Portugal, con alrededor de un millón de has., en donde es considerado como un árbol estratégico de interés nacional por su producción de corcho. A continuación, en superficie España y Argelia, con medio millón de hectáreas. Le siguen en orden decreciente: Marruecos, Francia, Túnez e Italia. España aporta el 25% de la superficie mundial, de las Andalucía aporta el 50%, Extremadura el 30% y Cataluña el 15%.

El alcornocal es una de las masas forestales más características de Andalucía, ocupando alrededor de 245.000ha., la mayor parte de ella, en el Parque Natural de los Alcornocales, lo que convierten a esta zona en una de las principales áreas corchera de toda la Península Ibérica.

El alcornoque no suele aparecer formando bosques puros, lo más usual es que otros arboles compartan su espacio, y se mezclen en función de las condiciones edáficas y climática del lugar; así, en las solanas, con suelos mas arcillosos, lo acompaña el acebuche, que lo sustituye completamente en los bujeos. En la umbría, su acompañante principal es el quejigo, que lo erradica en los valles, junto a los cursos de agua y en faldas/cumbres montañosa donde la niebla juega un importante papel en el aporte de humedad. 

Es un árbol ni muy alto, ni muy grueso, lo normal es que su grosor no supere los tres o cuatro metros de circunferencia. Las hojas son pequeñas, perennes y coriáceas, perfectamente adaptadas a resistir el largo periodo estival de sequía.

La flor del alcornoque se poliniza con el viento, al igual que otros muchos árboles, lo que supone producir gran cantidad de polen. Las flores masculinas se disponen en amentos delgados y colgantes, de color verdoso y rojizo. Las femeninas, brotan en la axila de las hojas y son más pequeñas. Como todos los árboles del genero Quercus, el fruto que produce es una bellota, sustento de un amplio elenco de animales salvajes y recurso inmejorable para el cerdo ibérico en montanera. 

Bibliografía:

  • Los Alcornocales. Jose Miguel Montoya Oliver. Publicaciones de Extensión Agraria Madrid 1980.
  • El Alcornoque y El Corcho. L. Velaz de Medrano y J. Ugarte. Espasa Calpe, 1922.
  • Manual de Reforestación y Cultivo del Alcornoque. Gregorio Montero González. Editorial Mundi Prensa, 2003. Publicaciones del INIA.
  • El Alcornoque y El Corcho. Fernando Pérez Marqués/Maria Celestina Pérez Glez. Ediciones de la ASOCIACIÓN CULTURAL VICENTE ROLLANO.1996.
  • Guía Didáctica del Parque Natural de los Alcornocales. Consejería de Medio Ambiente. 2004.